La tendencia indica que la compra online seguirá creciendo. Es un hecho que cada vez más consumidores compran online movidos por valores como la comodidad y el precio. Pero desgraciadamente lanzarse a trasladar el negocio al entorno online no es garantía de éxito.

Abrir una tienda online es el equivalente a abrir un negocio en una calle por la que no pasa nadie, por lo que es necesario trabajar en ello para conseguir los resultados esperados.

Antes de empezar tengo que pararme a observar

Antes de lanzarnos a la piscina y montar un ecommerce para nuestra farmacia, hemos de pararnos a observar el contexto dónde vamos a emprender nuestro negocio.

Para ello debemos ver qué está haciendo nuestra competencia; qué tipo de negocios venden productos relacionados con las categorías de autocuidado por internet y cómo lo hacen.

Para ello debemos observar el rango de precios en el que se mueven, cómo están estructurados sus sitios de venta online, qué tipo y qué número de referencias venden, métodos de pago que tienen habilitados.

¿Y ahora? ¿Dónde quiero posicionarme?

Cuando ya hemos mirado a nuestro alrededor el siguiente paso es definir en qué segmento del mercado queremos estar; qué plataforma queremos utilizar, con la ayuda de quién queremos contar y cómo vamos a definir nuestra marca de venta online.

Para ello podemos valernos de la ayuda de profesionales con experiencia que puedan guiarnos en las fases de diseño y desarrollo de nuestro ecommerce de farmacia.

Es de vital importancia que antes de empezar esbocemos una idea de cómo queremos que se perciba nuestra farmacia online. Igual que hacemos una reforma en la farmacia física o colocamos estratégicamente las categorías en el espacio de venta para logar unos objetivos, el diseño de nuestra tienda online es fundamental.

Diseño y usabilidad: el primer incentivo de compra

El diseño es un pilar clave en la experiencia de compra online. Que la página sea usable e intuitiva hará que la tasa de abandono en proceso de compra online sea baja. Para un diseño óptimo, a grandes rasgos hemos de valorar los siguientes puntos:

• El usuario tiene que poder comprar en pocos pasos: Además, tiene que poder navegar fácilmente por el sitio web y encontrar lo que busca (en caso de que en la farmacia trabajemos con ello claro está). Un buscador grande, una categorización correcta y pocos “clicks” hasta llegar a la fase de pago pueden ayudar a que seamos nosotros los que guiemos a nuestro usuario a través de la página.
• La adaptación a la compra móvil es imprescindible: Cada vez son más los compradores que lo hacen mediante dispositivos distintos al ordenador. Tabletas y móviles han de permitir una correcta visualización de la tienda para no entorpecer la experiencia de compra

Valor añadido: Cómo fomentar la compra una vez publicada mi web

Igual que en la farmacia física nuestros mayores activos son el producto y el servicio en la tienda online ha de ser exactamente igual.

• Catálogo: Entre las innumerables ventajas del ecommerce no está la de poder tocar el producto, es por ello que uno de nuestros principales focos debe estar en facilitarle al comprador el conocimiento de dicho producto. Un buen catálogo de fotos y una buena descripción cumplirán esta función.
• Confianza: Es imprescindible que el cliente ecommerce aprecie que detrás de la plataforma digital hay un equipo humano que pueda resolver dudas y posibles incidencias. Por ello es muy importante que en dicha plataforma de venta figuren datos tales como teléfono, dirección de la farmacia, email de contacto, una página que explique brevemente “quiénes somos” y los textos legales que contengan entre otras cosas políticas de envío y devolución.

Herramientas de apoyo: el remate final

A grandes rasgos ya hemos desentrañado los puntos principales que ha de tener nuestro ecommerce para empezar a funcionar. Pero… ¿cómo promocionar la tienda online?

• Redes Sociales: Una buena estrategia en redes puede ser la catapulta definitiva del ecommerce de la farmacia. Un contenido llamativo y que informe de la tienda es clave. En este punto ser coherentes y constantes es vital.
• Blog: Muy ligado al punto anterior está el uso del blog en la estrategia de venta. Una buena estrategia de contenidos nos ayudará a apoyar la venta en el consejo farmacéutico.
• Email Marketing: Es una potente herramienta. Para que funcione bien y así atraer y fidelizar a los clientes ecommerce, tenemos que cuidar el contenido. Una buena recomendación es intercalar los productos con consejos que se envíen en forma de newsletter de la farmacia. ¡Es una buena forma de unir redes sociales, blog y email marketing!

La venta online requiere cuidados e ilusión, sobre todo en su fase inicial, pero con un buen asesoramiento y con compromiso conseguiremos que el mayor de nuestros trabajos sea preparar pedidos.