La strawberry skin, llamada en España “piel de fresa”, es como se conoce comúnmente a la piel con poros dilatados y puntos negros, que pueden recordar a las semillas de una fresa. No se trata de un término dermatológico.

Causas de la piel de fresa

La piel de fresa aparece normalmente en las piernas, pero también se puede presentar en los brazos y en la espalda. Hay diferentes causas que pueden provocar la piel de fresa, como:

• Piel seca: tener la piel deshidratada puede hacer que se pronuncie la apariencia de los poros y hacer que se confundan con puntos negros.
• Daño solar: si te expones demasiado al sol sin protección, los poros de tu piel se pueden oscurecer. Esta es una de las formas en las que el sol puede dañar tu piel.
• Foliculitis: la inflamación de los folículos pilosos puede provocar pequeños bultos rojos o puntos negros alrededor de los poros.
• Obstrucción de folículos pilosos: las células muertas, la suciedad y la grasa que se acumula en la piel, obstruye los poros y los dilata. Esto puede ocurrir en cualquier parte del cuerpo, pero de las soluciones a los puntos negros en la cara hablaremos en otro artículo.

Tratamiento para la piel de fresa

Mimar nuestra piel y tener una rutina de cuidados hará que la mantengamos sana y libre impurezas. Te recomendamos aplicar los siguientes consejos:

• Exfoliación: esta práctica es la que hace que podamos evitar la obstrucción de los folículos pilosos. Exfoliándonos la piel estamos eliminando todo el sebo y piel muerta que se acumula en los poros. El ácido salicílico y el glicólico son dos buenos ingredientes exfoliantes.
• Hidratación: hidratar la piel de forma regular es una práctica que nunca deberíamos saltarnos. Sin embargo, se hace más necesaria cuando exfoliamos la piel, ya que si no la rehidratamos estaría expuesta a daños. Además, con la piel exfoliada los productos que aplicamos penetran mejor, por lo que son más eficaces. Recuerda que en los hidratantes que elijas tiene que especificar que son no comedogénicos.
• Protección solar: proteger el cuerpo del sol todo el año, hará que la piel se mantenga sana y lisa. Tenemos que tener especial cuidado cuando aplicamos exfoliantes, ya que la piel queda más sensible y más expuesta al daño solar.
• Uso de productos cuidadosos con la piel: hay que tener cuidado con qué aplicamos a la piel. Debemos tener especial cuidado con los exfoliantes fuertes, ya que pueden ser abrasivos para la piel. En casos en los que no sabemos cómo va a reaccionar nuestra piel, es recomendable probar el producto en una pequeña zona y esperar unas horas, o incluso hasta el día siguiente.
• Evitar productos comedogénicos: se llama así a los ingredientes que obstruyen los poros, provocando piel de fresa, entre otras afecciones. Hablamos, por ejemplo, de algunos aceites como el de coco o el de almendras. Para hidratar la piel evitando la obstrucción de los folículos pilosos, podemos optar por aceites no comedogénicos, como el de argán o el de jojoba.

Te dejamos una serie de productos hidratantes para humectar tu piel después de la exfoliación.